¡El mural se queda!
El pasado 21 de enero, en el Pleno de Ciudad Lineal, Vox consiguió sacar adelante una moción para que se borre el mural feminista del centro polideportivo de la Concepción por su "mensaje político". La proposición contó con el apoyo de PP y Cs y el rechazo de Más Madrid y PSOE. El mural, de unos 60 metros, fue creado en 2018 por un colectivo artístico, Unlogic Crew, con la colaboración de decenas de vecinos dentro del programa municipal Compartiendo Muros. La obra retrata a mujeres que forman parte de la historia por su lucha por la igualdad, como Rosa Parks, Frida Kahlo, Angela Davis, la escritora Chimamanda Ngozi o la cosmonauta Valentina Tereshkova, bajo el lema "las capacidades no dependen de tu género".
La reacción de las asociaciones vecinales como la Valle Inclán de Prosperidad, el Sol de la Conce, la Asociación Vecinal de Quintana o las AMPAs de los colegios Nuestra Señora de la Concepción, Carlos V, México, San Benito, Leopoldo Alas, Miguel Blasco Vilatela, San Juan Bosco, San Juan Bautista y Colegio Cultural Elfo ha sido de rechazo a la eliminación de este mural.
Gracias a la presión social, el pasado martes 26 de enero, el pleno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado mantener el mural debido al cambio de postura de Cs y la vicealcaldesa Begoña Villacís. Desde el AMPA estamos muy contentos con el resultado de este proceso y, desde esta humilde plataforma, seguiremos defendiendo la cultura y la integración en nuestro barrio.
Las asociaciones, vecinos y vecinas de Ciudad Lineal nos unimos en defensa del mural. Un mural que nos enorgullece porque es motivo de inspiración, de igualdad y de cultura. #ElMuralSeQueda #ElMuralNoSeToca
En la prensa:
El Ayuntamiento de Madrid borrará un mural feminista de un polideportivo a propuesta de Vox
Lucha vecinal en Ciudad Lineal en defensa de un mural feminista
Los vecinos se unen contra la amenaza de Vox de destruir un mural feminista
El mural feminista se mantiene tras el cambio de voto de Villacís
Mural in Madrid that celebrates women pitched into Spain's culture wars